LA REBELIÓN DE LOS BUENOS ( Roberto Santiago)

La rebelión de los buenos es la segunda novela para adultos del autor Roberto Santiago más conocido como creador de la saga juvenil Los Futbolísimos.

La trama :

Fátima Montero, propietaria de una gran empresa farmacéutica se presenta en un modesto bufete de abogados para divorciarse de su marido. Un asunto que parece muy sencillo para el abogado Jeremias Albi va a revelar como una historia más complicada que nos adentra en el mundo de los negocios poco éticos de algunas empresas farmacéuticas.

Una novela bien ambientada en el madrileño barrio de Carabanchel, que voy conociendo poco a poco, y que te atrapa y te ofrece giros que hacen disfrutar de la lectura.

Citas del libro que me han evocado un viaje, lugar o viceversa

“Al anochecer conduje hasta Plaza Elíptica donde se perdía la frontera de Carabanchel"

“Aquella casa adosada en la Ciudad de los Periodistas era vieja, se encontraba lejos de todo y siempre había estado llena de humedades …”

Estábamos en lo alto del centro comercial Mirador Rio, frente al Manzanares”

  

LAS HORAS COMPLETAS ( Luis Mateo Diez)

Muchos de los libros que aquí aparecen son propuestas del Club de Lectura Dulcinea de Argamasilla de Alba al que pertenezco. Esta vez la motivación era que Luis Mateo Diez ha sido Premio Cervantes en 2023.

 El argumento: Cinco sacerdotes alojados en un viejo automóvil recorren la meseta castellana para ir a merendar a casa de un sacerdote amigo en un pueblecito vecino. En el trayecto recogen a un peregrino que les complica el viaje. Durante el camino hablan y hablan y cada uno de ellos se abstrae y se sumerge en una reflexión sobre sus obsesiones y percepciones. 

Algunas de las situaciones planteadas en el libro son absurdas pero resulta entretenido y el lenguaje es muy bello y preciso.

Surgen muchas frases para reflexionar: 

"Qué sabrá usted de lo que es una vida echada a perder, del sufrimiento y las penalidades de andar por ahí tirado. Si ustedes apenas huelen el mundo. Apenas saben de la función lo que los demás les cuentan. Los sentimientos verdaderos ni los catan." ( pág 64)

"La muerte, no lo duden, es el salvaconducto para una siesta infinita. Yo me apuntaba ahora mismo, porque desde luego no hay idea mejor para un vago que ésa de la eternidad. A mí trabajar nunca me gustó, ni siquiera en estos trabajos de tanto teatro como el de ustedes. Y hay que reconocer que esto de vivir ya es, con frecuencia, un trabajo jodido en sí mismo." (39)